Analisis de datos a un mes de sana distancia
Pocos eventos en la historia de la humanidad han afectado tanto, a tantas personas, y por tanto tiempo, como la pandemia de la COVID-19. Además de las terribles desgracias personales que trae la enfermedad, miles de millones de personas y empresas en todo el mundo son afectadas por un fenómeno que parecía imposible, detener en seco al planeta.
La interrupción prolongada de actividades está provocando pérdidas de ingresos y salarios que no será posible resistir para un gran número de empresas y personas, pues ningún negocio lícito se hace para acumular dinero en la caja (en ese caso mejor se devuelve a los dueños, que no necesitan una empresa para tener el dinero en el banco) y poca gente tiene para vivir de sus ahorros.
Ante esta insostenible situación, así como la sombría perspectiva del largo tiempo que tardará que las cosas vuelvan al nivel que tenían antes, todos quisiéramos que esto acabara ya. Sin embargo, reanudar actividades será una decisión difícil, que deberá ser tomada con datos suficientes para asegurar que no habrá una nueva ola de contagios que no se pueda controlar.
En México iniciaron formalmente las medidas de distanciamiento social el 23 de marzo de 2020. Transcurrido más de un mes, es importante tener alguna idea de cómo están evolucionando las cosas, más allá del dato diario de casos y las defunciones. Por ello decidí hacer un análisis de la base de datos de casos estudiados que publica la Secretaría de Salud en su página de datos abiertos.
Utilicé la base de datos correspondiente al 29 de abril, que tiene información de 81,192 casos estudiados (uno de cada 1,500 mexicanos es caso estudiado). De cada uno, hay 30 atributos que tomé para el análisis: el número de identificación, el resultado de la prueba, 10 datos de la atención médica, 6 sociodemográficos y 12 de otras condiciones médicas presentes, o comorbilidad.
Situación General
Al 29 de abril de 2020 hay 17,799 casos confirmados, 50,849 casos que resultaron negativos y 13,263 con resultados pendientes (1 de cada 4 pruebas realizadas han tenido resultado positivo). Desafortunadamente se han presentado 1,732 defunciones, lo que nos coloca como el onceavo país en el mundo con mayor tasa de letalidad (defunciones entre casos confirmados).


Hay una incidencia mayor de casos entre los hombres, pues representan 58% de los casos y sólo 49% de la población. Por otro lado, la incidencia es mucho mayor entre las personas mayores de 20 años (Los menores de 20 años representan 36.4% de la población, pero sólo 2.2% de los casos confirmados).
El 1.5% de los casos confirmados declaran hablar alguna lengua indígena, en tanto que 98.9% declara tener nacionalidad mexicana.


Contacto con otros casos confirmados
Aunque se desconoce la información para 38% de los casos, casi la mitad de los casos confirmados tuvieron contacto con otro caso diagnosticado de COVID-19.

Prácticamente el 90% de los casos confirmados fueron identificados en instituciones de salud del Gobierno Federal (Secretaría de Salud, IMSS e ISSSTE).
El 60.4% de los casos confirmados han recibido atención ambulatoria, el 35.3% ha requerido hospitalización y el 4.3% ha sido intubado para recibir apoyo respiratorio (menos de 1 de cada 9 hospitalizados).


Atributos de comorbilidad
La principal condición adicional a la COVID-19 registrada en los casos confirmados ambulatorios, hospitalizados e intubados, así como en las defunciones, es la neumonía. Después vienen la diabetes, la hipertensión y la obesidad. Las otras condiciones registradas tienen una presencia sustancialmente menor. La neumonía, la diabetes, la hipertensión, la insuficiencia renal crónica y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) incrementan de manera importante su participación en los pacientes hospitalizados e intubados, así como en las defunciones.


Evolución diaria de casos
A nivel nacional, el numero diario de casos nuevos ingresados, el de casos nuevos confirmados y el de defunciones mantienen una marcada tendencia de crecimiento. Estos son los números que hay que seguir, más que las cifras acumuladas, pues la ausencia de casos nuevos durante un cierto número de días es el indicador clave para ver si ha terminado la crisis.
Como los datos varían mucho de un día a otro, en este ejercicio medimos la tendencia con el promedio móvil de 7 días. Para cada día, este indicador es el promedio de la última semana. Así, el promedio móvil del 22 de abril es el promedio del día 16 al 22. Aunque tenemos cifras hasta el 29 de abril, calculamos el promedio móvil sólo hasta el 22, a fin de considerar el tiempo que tarda un caso en cualquier parte del país en ser incorporado a la base de datos nacional (así evitamos reducciones que reflejan rezagos de registro y no un menor número de casos).



Evolución por fecha de inicio de síntomas
Los datos por fecha de ingreso son un indicador de la velocidad con que se incorporan nuevos casos al sistema de salud. Sin embargo, no guardan relación con el padecimiento. Por eso un mejor indicador de la evolución del contagio es el número de casos por fecha de inicio de síntomas, que además permite apreciar el efecto de las medidas de contención.
A un mes del distanciamiento social, los casos confirmados por fecha de inicio de síntomas se han cuadruplicado. La base de datos registra 209 casos que empezaron a mostrar síntomas el 23 de marzo de 2020, fecha de inicio de las medidas de sana distancia. El 20 de abril, 28 días después, el número de casos que empezaron a mostrar síntomas ese día fue 842. No obstante, a partir del 16 de abril pareciera haber una desaceleración en el crecimiento del promedio móvil de 7 días.
Distribución de casos confirmados por entidad federativa
Más de la mitad de los casos confirmados se concentran en la Ciudad de México, el Estado de México y Baja California. Otro 22% está en Tabasco, Sinaloa, Quintana Roo, Puebla, Veracruz y Yucatán. Los restantes 23 estados concentran 26% los casos.
Incidencia por entidad federativa
Para comparar adecuadamente la situación de los diferentes estados debe tomarse en cuenta el tamaño de su población, por eso utilizamos como medida el número de casos por millón de habitantes. Al 29 de abril de 2020, hay 6 estados con más de 200 casos confirmados por millón de habitantes, 18 que tienen entre 50 y 200, y 8 que tienen menos de 50 casos por millón.
Letalidad por entidad federativa
De acuerdo con el tablero de la Universidad John Hopkins, en el mundo hay 3,193,165 casos confirmados y 227,623 defunciones al 29 de abril. Esto equivale a una tasa de letalidad de .0713 (defunciones entre casos confirmados). Hay 8 estados de la República Mexicana que tienen una tasa de letalidad mayor a dos veces el promedio mundial, 18 con una tasa de 1 a 2 veces el promedio mundial, y 6 estados con una tasa de letalidad menor al promedio mundial.
Tendencias por entidad federativa
De los seis estados con alta incidencia, la ciudad de México muestra un crecimiento importante del promedio móvil de 7 días de casos confirmados por fecha de inicio de síntomas. Baja California y Baja California Sur presentan una reducción, en tanto que Quintana Roo, Sinaloa y Tabasco muestran cierta desaceleración.
De los 8 estados con baja incidencia, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Oaxaca y Zacatecas muestran un crecimiento importante del promedio móvil de 7 días de casos confirmados por fecha de inicio de síntomas. Colima, Durango y San Luis Potosí mantienen cierta estabilidad.
Resumen de indicadores por estado
A continuación, se presenta una matriz que sintetiza los indicadores de casos, incidencia, letalidad y tendencia por estado. Están ordenados para empezar por los valores más negativos.
Conclusiones
A un mes de la implantación de las medidas de distanciamiento social, no hay señales de que pueda haber una reanudación generalizada de actividades pronto. A nivel nacional sigue creciendo el número de casos nuevos por día que ingresan al sistema de salud, aunque parece haber cierta desaceleración en el número de casos por fecha de inicio de síntomas a partir del 16 de abril.
A nivel estatal sólo cinco entidades muestran una disminución en el número de casos nuevos por fecha de inicio de síntomas (Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Nuevo León y Sonora). En el resto de las entidades están creciendo todavía los casos nuevos por día.
Dada la concentración de la población en las zonas urbanas, seguramente un análisis a nivel municipal llevaría a que hay cientos de municipios en los que no hay una incidencia o crecimiento importante en el número de casos, o aún algunos en los que no se están presentando casos nuevos.
No obstante, me parece que ello no
modifica de manera sustancial estas conclusiones. Los municipios no tienen una
vida aislada y tienden a mantener una relación con otros municipios más grandes,
donde continúa el contagio. Por otro lado, es en los municipios y alcaldías importantes
donde se concentra la mayoría de la población y la vida económica del país, por
lo que habrá que esperar a que haya señales importantes en ellos para pensar en
regresar a la vida normal como nación.